Descripción del proyecto
05/2020
Jimena Alguacil es abogada tanto en Argentina como en España y asesora en materia de Compliance a empresas de toda Iberoamérica. Además, se dedica a la formación en Compliance colaborando con diferentes universidades en España, Estados Unidos y Argentina, así como a organizaciones a través de la empresa de la que es fundadora, TOTH Compliance.
Tenemos claro que el área de Compliance en las empresas no solo tiene la tarea de identificar, prevenir y, en su caso, mitigar los posibles riesgos normativos que se puedan materializar en las entidades, pero también tiene una función clave en la sensibilización y difusión de la cultura de la integridad y la ética empresarial en el seno de las organizaciones. Además, el contexto actual en el que muchos estamos teletrabajando, puede ser una buena ocasión también para potenciar la formación online en este sentido.
1.-¿Por qué es importante la realización de formaciones en Compliance en las empresas? ¿Qué aporta tanto a la empresa como a sus profesionales?
El equipo humano es el principal activo que tienen las organizaciones (no solo las empresas sino también las asociaciones, fundaciones e incluso partidos políticos).
El éxito o el fracaso de la misma depende en gran parte del equipo que la compone.
El capital humano es la carta de presentación de la empresa y afecta directamente a la satisfacción de clientes, terceras partes, proveedores… Por eso nosotros en las formaciones de Compliance ponemos el foco en el capital humano como ventaja competitiva en un mundo globalizado y, por consiguiente, es fundamental invertir en formación para preparar a nuestros talentos a las necesidades de nuevos puestos de trabajo que se presenten, disminuir los niveles de rotación, aumentar la satisfacción pero, sobre todo, para generar una cultura de Compliance dentro de la organización y esta cultura de Compliance nos diferencie respecto a la competencia.
La formación es un trabajo multidisciplinar, en el cual todo el desarrollo de la formación está íntimamente ligado a otras áreas de la empresa, por ejemplo marketing, recursos humanos… en el que cada una de las partes aporta.
2.-¿Qué es un Plan de Formación y qué debemos tener en cuenta para elaborarlo?
Son muchos los aspectos a tener en cuenta pero el principal es cuál es saber cuál es la necesidad de la empresa en materia formación. En ese sentido, se debe tener en cuenta que si quiere formar a los trabajadores, los mandos intermedios, la alta dirección o si la empresa cuenta con operarios en diferentes turnos, por ejemplo.
Ahora también hay una fuerte demanda por parte de las empresas para hacer formación a sus terceras partes: los franquiciados con los que se vinculan, a las subcontratadas, a sus proveedores…
También hay que tener en cuenta la metodología, es decir, si se quiere hacer presencial, online, si se quiere introducir técnicas de gamificación… Y, por supuesto, los contenidos. Si queremos formar sobre el Código Ético y la política Anticorrupción empresarial, si se quiere abordar el tema de los conflictos de interés, prevención del blanqueo de capitales, protección de datos, secretos profesionales, Antitrust… Actualmente, además, estamos recibiendo una fuerte demanda tanto de transformación digital como de seguridad laboral.
3.-¿Cómo debe ser una formación para ser realmente efectiva? ¿Cuáles son los principales errores que se cometen?
Es necesario que el curso tenga contenidos personalizados, dinámicos y originales, estos conceptos son clave para que el usuario que acceda a la formación disfrute de una verdadera experiencia.
Para los temas de eficacia o formación efectiva es importante tener en cuenta la ISO 19600, que nos dice que una formación diseñada y ejecutada adecuadamente proporciona una manera eficaz para que profesionales comuniquen potenciales riesgos en la empresa.
Por lo tanto, es importante que la formación:
- sea a medida
- que se lleve a cabo desde el inicio de la relación laboral
- esté alineada con el programa de formación corporativa
- sea práctica y fácilmente comprensible
- sea relevante para el trabajo diario de los profesionales
- sea ilustrativa de la industria, del sector y de la operativa geográfica
- sea flexible y actualizada
- sea registrada para que la empresa pueda acreditar que se ha llevado a cabo de esas formación
- sea diferencial para que impacte en los profesionales
4.- No solo los empleados deben hacer formación, ¿por qué es relevante que el personal directivo también esté implicado?
Es fundamental que todas las partes implicadas en la organización conozcan las políticas de Compliance dentro de la empresa. De poco servirá tener el mejor programa de Compliance o el mejor mapa de riesgos si las partes de la organización, sus socios de negocio, sus proveedores, sus colaboradores o incluso sus consumidores no conocen los principios básicos en los que se sustenta dicho programa.
Es decisivo poner el foco en la cultura empresarial y para ello, hay que implicar a la alta dirección. En la actualidad, se está viendo un importante cambio de concienciación sobre la importancia de transmitir estos valores desde los cargos de responsabilidad y decisión de las compañías. También se está viendo el aumento de actividades participativas como la creación conjunta entre empleados y directivos del Código de Conducta corporativo, que hace aumentar la conexión entre ambos. Todos ellos se convierten en los que yo llamo “Compliance influencers”, sientiéndose parte del programa y llevando el escudo de la empresa.
Además, son muchos los Estados que están regulando este “Tone at the top”, por ejemplo, recientemente en Chile la Superintendencia de Valores y Seguros ha publicado la norma en la que exige a las sociedades fortalecer su gobierno corporativo y establecer formaciones obligatorias para alta dirección en gobierno corporativo, inclusión, diversidad, sostenibilidad, gestión de riesgos… porque esta es una de las formas más importantes de generar conciencia en la organización.
Cuando la empresa ve los resultados y el valor adicional que tiene una correcta formación en Compliance, los hechos hablan por sí solos.
5.-¿Qué opinas del fenómeno de la gamificación en Compliance?
Para los que no hayan escuchado nunca antes la palabra, “gamificación” viene de “game”, juego. Actualmente la utilización de la gamificación en las empresas es una realidad, ya que los juegos son un poderoso sistema de generación de compromiso.
Los juegos generan un sistema de recompensas, ránkings entre profesionales, reconocimientos, generación de metas y reglas de juego, historias, actividades competitivas, desafíos… es una actividad que asociamos a la involucración por puro placer pero también es una vía privilegiada para conseguir el “engagement” con la compañía, la marca, el trabajo y el aprendizaje.
El incorporar un alto contenido gráfico y de animación también es importante para atraer al alumno, nosotros colaboramos con un equipos de diseño gráfico en más de 5 países.
6.- ¿Qué ventajas e inconvenientes tienen las formaciones online?
La formación es una realidad desde la llegada a internet y la vida 2.0. En España un 70% lo utiliza también por razones educativas/laborales y tiene cada vez más un papel mayor en la aprendizaje a lo largo de la vida. Lo vemos porque año tras año ha aumentado la demanda de este tipo de contenidos.
La posibilidad de realizarlos en cualquier momento hace que permita conciliar la vida laboral con la vida familiar. Por otro lado, se reducen los costes, porque se evitan los desplazamientos y la logística asociada a las formaciones presenciales.
También permite que empresas con alta rotación de trabajadores, puedan dar de alta de forma automática a los trabajadores que se van incorporando.
Para poder aprovechar todas las ventajas de las formaciones online hay que huir de formaciones online con metodología estática o desactualizada.
7.-¿ Por qué es necesario obtener evidencias de la realización de las formaciones?
Es importante evidenciar desde un inicio la implantación del programa de Compliance de forma efectiva, por lo que la comunicación del mismo a todas las partes será fundamental. Todas las acciones que se realicen mediante formación persiguen el cambio efectivo en las operativas de negocio y en la conciencia de los que se relacionan con la organización.
La evidencia es fundamental porque es la forma que también tiene la empresa de acreditar que ha realizado una campaña de formación y se ha llevado a cabo de forma efectiva. Esto podría servir para mitigar una potencial responsabilidad en caso de ilícito penal.
8.- ¿Cuáles son las principales diferencias que observas en Compliance entre España y Latinoamérica?
Las diferencias son muchas. El lazo histórico que une Latinoamética con España hace que también se creen muchas sinergias en esta materia. Aquí en Europa son muchas las normativas que tratan el tema de la formación, aunque también es cierto que no hay mucha homogeneidad entre los diferentes países. Por ejemplo, en Francia la Ley Sapin II establece la formación como un punto básico del programa de Compliance. mientras que aquí en España el artículo 31 bis del Código Penal no hace mención expresa a este tema.
Pero Latinoamérica no se ha quedado atrás. Chile, por ejemplo, lo incorporó ya en 2010 y concretamente la Ley 20393 establece que incluso en la certificación de compliance deberán acreditarse los mecanismos de capacitación y difusión adecuados.
En Colombia tienen una responsabilidad de la persona jurídica netamente administrativa, pero han sacado una circular en la que establece el compromiso de los altos directivos de liderar la estrategia de comunicación adecuada para garantizar la divulgación eficaz de los programas de Compliance.
En Argentina el caso es muy llamativo porque el artículo 23 de la Ley 27401 aprobada en el año 2016 tiene una interpretación bastante discutible: en su primera parte indica que los programas de Compliance “deberán contener” un Código Ético, reglas y procedimientos en caso de presentarse a concursos públicos y habla de capacitaciones periódicas, mientras que la segunda parte indica “podrán contener” un Compliance Officer, un Canal Ético o un mapa de riesgos, por lo que se establecen las formaciones como un requisito obligatorio.
Además, tanto en Argentina como en Brasil, que imitan un poco la filosofía de Estados Unidos en este sentido, la necesidad de tener un programa de Compliance para contratar con el Estado es ineludible.
Ya forma parte de muchas exigencias de mercado, de las multinacionales y de la propia OCDE, que ha tenido un papel crucial en Latinoamérica.
9.- ¿Para finalizar, qué consideras que es lo mejor de tu profesión?
Sin duda creo que es el hecho de generar cambios. Ver el antes y el después, la interacción con las personas, ver que el Compliance se está convirtiendo en un elemento competitivo… el mercado y los consumidores están exigiendo empresas éticas y hay que premiar las empresas que están invirtiendo en formación, en cultura ética y responsabilidad social corporativa.
Esta entrevista también puedes escucharla en: https://compliancepills.com/quiero-podcast/
