Descripción del proyecto

11/2019

El Consejo de la Unión Europea ha aprobado recientemente lo que conocemos como “Directiva sobre Whistleblowing” (Directiva del Parlamento Europeo y del Consejo relativa a la protección de las personas que informen sobre infracciones del Derecho de la Unión) que regula tanto los canales de denuncia de incumplimientos como las garantías que se ofrecen a los alertadores.

¿Por qué esta Directiva?

1.- Porque son las personas que trabajan día a día en las organizaciones y que conocen su funcionamiento al 100% las que pueden detectar tempranamente aquellos comportamientos que se alejan de la legalidad.

2.- Porque prevenir, detectar e investigar posibles incumplimientos en una primera fase resulta más económico y eficaz que hacerlo a posteriori.

3.- Porque las infracciones al Derecho de la Unión generan graves perjuicios al interés público.

4.-  Porque uno de los motivos principales por los que las personas no se atreven a alertar es por el miedo a represalias, por lo que deben garantizarse las máximas medidas de protección a las personas que colaboran a este interés público.

5.- Porque la normativa que cubría los canales de denuncia era desigual en los diferentes países de la Unión Europea.

Sin duda los canales de denuncia se han convertido ya en una pieza clave dentro de los sistemas de Compliance de las entidades jurídicas.